Opinión

Una maldición

Ulysses Bloodstone, un legendario cazador de monstruos ha muerto. A su funeral son convocados una serie de personajes (con varias muertes a sus espaldas), entre ellos Jack Russell, un descendiente de los licántropos, y su hija Elsa, entrenada desde pequeña para seguir los pasos de su padre. Se los pondrá a prueba para encontrar un digno sucesor de Ulysses, asimismo, el elegido ostentará el amuleto bloodstone (reliquia que otorga poderes sobrenaturales a quien lo posea).
Es así como se sumergen en una aventura en donde tendrán que luchar por sus vidas, se verán inmiscuidos en una situación peliaguda, teniendo como colofón resultados inesperados que pondrán a prueba su destreza en la caza.
Este es, de un modo aproximado, el argumento de: «La maldición del hombre lobo», especial para la televisión dirigido por Michael Giacchino. Una propuesta simple que presenta a Russell, personaje que sufre una maldición, a pesar de parecer humano, en noches de luna llena, muta y se convierte en un monstruo, en ese estado tiene problemas consigo mismo, la transformación le ocasiona caos en su personalidad, tiene una lucha interior para mantenerse consciente y no perder el control, sin embargo, le resulta imposible, ya que sus instintos básicos se apoderan de él y echan a perder todas las buenas acciones que pueda realizar.
En menos de una hora de duración, el relato de este hombre lobo, nos muestra un mundo terrorífico, en donde tienen lugar una serie de acontecimientos escabrosos (en las sombras se esconden los más grandes temores del ser). Uno de los méritos de la trama es ir directamente al meollo del asunto, no se extiende innecesariamente, no se va por las ramas y consigue un efecto interesante con esa decisión, en este caso menos, es más. Deja de lado parlamentos innecesarios o giros de guion que solo distraen en lugar de aportar elementos sustanciales a la trama.
Esta realización es un producto diferente, sorprende por su propuesta y por su soplo vintage, por su aire de obra atemporal, que hace uso de artificios que se han vuelto obsoletos por los avances tecnológicos, en tal sentido, su argumento se ve enriquecido por el buen desempeño de sus actores, ya que realizan excelentes interpretaciones y con ello dan realce a todo lo que se ve en pantalla.
Así pues, con la buena dirección logra encandilarnos, además sus nudos e indicios nos llevan a un desenlace bien elaborado, cuidado, que consigue crear interés por llegar a su final, el cual no deja indiferente al espectador.
Tras ver la puesta en escena queda un buen sabor de boca, ya que otorga momentos destacables, en los cuales descubrimos que los verdaderos monstruos son los humanos. Por otro lado, el modo en el que, Werewolf by Night, juega con los claroscuros, genera un ambiente escalofriante, incluso los momentos más tensos se generan gracias a una banda sonora adecuada. A pesar de su sencillez logra atrapar la atención del espectador y que empaticemos con quienes, en teoría, son los malos de la historia.

Lume

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